jueves, 17 de marzo de 2011

El otoño, los ñoquis y las armas nucleares

Históricamente, marzo ha sido el mes en el que se desataron los eventos más desafortunados del año. A la terrible mezcla climática (frío-calor) del período en el que concluye el verano y empieza la estación más mediocre del año, se suma el inicio del ciclo lectivo y la gran cantidad de family games tildados que se registran a lo largo de dicho mes.

Esta mala suerte tiene una sola explicación, y es que febrero tiene 28 días. Los más impacientes dirán ¿qué joraca tiene que ver una cosa con la otra? Citando a un reconocido filósofo, diré “dame 5 minutos y te bailo una tarantela”.

Todos sabemos que, para invocar una racha inquebrantable de buena suerte durante 30 (treinta) días, cada 29 (veintinueve [sí, señora, se escribe así]) de mes debe consumirse al menos 1 (un) plato de ñoquis (ñoquis). Y aquí, señora, radica el secreto. Si marzo es, como muchos dicen, “el lunes del año”, febrero jugaría el ingrato papel del domingo, día récord en suicidios y tartas de atún. Y cómo no se va a suicidar la gente si en todo el mes no tienen un solo día para comer un plato de ñoquis como Bush manda.

La cosa es que en febrero no hay 29, y por ende no se comen ñoquis. “Qué más da”, dijo un día el bueno de Loscri, “si en febrero no hay 29, se ve que los ñoquis no son tan importantes” y decidió cortar de cuajo el ritual de fin de mes. Nunca habría imaginado que la harina y el agua, juntas y masticadas, influirían de tal manera en el destino de una persona. En la primera semana del mes siguiente lo dejó su mujer, el perro se comió a su tortuga, lo echaron del trabajo, se le quemó una torta y el perro murió intoxicado (no le cayeron muy bien ni la tortuga cruda, ni la torta quemada). Quiso compensar, obviamente, comiendo ñoquis toda la semana siguiente, pero todos sabemos que no es así como funciona la cosa, que los ñoquis se comen el 29 y con dinero bajo el plato.

Porque también existe el caso del recordado Félix Medialuna, que no descreía de la tradición de comer ñoquis el 29 pero sí de la de poner dinero bajo el plato y de la de tirar petardos en año nuevo. La crisis económica en la que se vio envuelto por incumplimiento de superstición fue tal, que pronto no sólo no tuvo dinero para poner debajo del plato de ñoquis, sino que tampoco tuvo para los ñoquis y mucho menos para los platos, que fue lo primero que vendió cuando la cosa se puso peliaguda.

Muchas veces se ha subestimado el valor de comer ñoquis como Bush manda. Y todos sabemos cómo manda George W. a comer ñoquis porque lo ha expuesto en su best-seller “Irak tiene ñoquis nucleares y otros cuentos”. Por eso, es importante no pedirlos nunca con salsa mixta, ya que está científicamente demostrado que al haber en un mismo plato dos salsas disfrazadas de una (en realidad no engañan a nadie) el poder de ese plato de invocar a la buena suerte se reduce a la mitad. ¿Cómo sería? Buena suerte, por supuesto, si de ñoquis hablamos, pero esta durará la mitad de tiempo (15 [XV {quince}] días) o bien durará lo mismo pero será la mitad de buena.

A comer ñoquis, pues, pero solo el 29 de cada mes y con dinero debajo del plato. Los mozos de los restoranes, agradecidos.

15 comentarios:

Anónimo dijo...

hahahahah q buen blog

Anónimo dijo...

ojo hay que tener cuidado con los noquis y fijarse bien con que se los acompaña, pueden ser muy traiconeros

Fer dijo...

Jajaja!! Maassaa...

El mejor amigo del ñoqui (confesión) dijo...

Soy igual que el ñoqui pero en vez de papa tengo espinaca. No soy un ñoqui, apenas soy su mejor amigo.

El único ñoqui (sale a limpiar su nombre) dijo...

No conozco a este metrosexual.

Anónimo dijo...

Justificame eso de que el otoño es mediocre si sos tan amable!

Marto dijo...

El próximo que exija algo sin identificarse con por lo menos un nombre ficticio, cobra.

El tema es que está ahí, viene después del verano que es una masa y es frío pero a veces pega un poco de calor, y se caen las hojas, queda todo horrible, con hojas por todos lados menos en los árboles y cuando viene el frío posta se borra, no se banca la responsabilidad de ser la estación del frió... No sé, no me cabe.

Además está en el medio, entre el verano y el invierno, que todos sabemos que son las estaciones posta. Eso la convierte en una estación del medio, o mediocre.

Anónimo dijo...

bien hecho marto. bien hecho

Anónimo dijo...

ÑOOOOQUICITOS

Andrea del Borda dijo...

Como bien dijo (B), el otoño es el Chatruc de las estaciones

Defensora de causas fútiles e intrascendentese dijo...

Aguante el otoño!! Mediocres serán sus respectivas madres

Las mediocres madres dijo...

"El otoño es un andante melancólico y gracioso que prepara pobremente el solemne adagio del invierno"
- George Sand

"Viento de otoño, tan fugaz como tú se fue mi amor."

Masajo Suzuki

"El otoño es una segunda primavera, solo que mas marrón y sin flores."
- Albert Camus - Albert Camus

"El otoño es una temporada seguida inmediatamente por la espera a la primavera."
- Doug Larson

De octubre (Otoño). Este es un mes particularmente peligroso para especular acciones bellas. El resto de los meses son Julio, Enero, Septiembre, Abril. Noviembre, Mayo, Marzo, Junio, Diciembre, Agosto y Febrero.
- Mark Twain



Y finalmente como decia la Tía Frida:

Otoño, otoño
que estación tan fria
otoño, otoño
nadie quiere a la tia
otoño, otoño
¡que coño!

Porroto dijo...

"...y se caen las hojas, queda todo horrible, con hojas por todos lados menos en los árboles y cuando viene el frío posta se borra..." MARTO. Se borra con el frio y encima no junta las hojas que tiró ... ahi la bardea mal.

"el otoño es el Chatruc de las estaciones" ANDREA DEL BORDA(Buen nombre pero te mandaste cualquiera! no sabes nada de fútbol... loca, vende patria!!)

"La verdad que el partido fue muy dificil" EL PEPE SAND.

En Fin..., bueno me distraje con los comentarios ahora leo la nota.

No preguntes quién! dijo...

ESPECTACULAR!!!!!!!!!!!! Bien por Marto, los ñoquis y el otoño. Mas Pan, aunque no lo pida!!!

Anónimo dijo...

"Te comes cuatro (indicando el numero con la palma de su mano) platos Ñoquis el 29 de febrero y quedas cubierto para los tres años siguientes". Dijo Carlos con su hocico lleno de salsa.
Luego se tiro un eructo y continuo comiendo el estofado de su tercer plato.

Con mucho cariño,

Anónimo.